Seguramente, en los últimos días, muchos de vosotros habréis visto en la TV o leído artículos en prensa escrita sobre la crisis como una época propicia para buscar oportunidades e ideas innovadoras. ¿Pero esto que quiere decir?
Nos quejamos permanentemente de conflictos familiares, problemas en el trabajo, dificultades económicas, discusiones con los amigos… Básicamente nos escudamos en culpar al entorno de aquello con lo que estamos insatisfechos y utilizar expresiones que refuerzan esa visión de culpabilidad externa a nosotros:
«Qué asco de vida», «Todo son problemas», «Mi vida es un desastre», «Todo me pasa a mí»
En definitiva, parece que toooodo está mal, pero nunca (o casi nunca) está bajo nuestro control el cambiarlo.
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| La vida es una carrera. Si paras a lamentarte de los baches o la velocidad del resto, nunca llegarás a la meta. |
Desengáñate y cambia el chip. La vida NO pone dificultades, trabas, ni problemas. La vida lo que pone ante ti son RETOS. Obstáculos que tenemos que sortear para llegar a dónde queremos. Y como tal está en tu mano conseguirlo, aunque evidentemente, no todos los obstáculos podrán salvarse con la misma facilidad.
La cosa se reduce a 2 opciones:
La fácil ¿Vas a quedarte quiet@ lamentándote de tu falta de oportunidades y recursos?
O la más compleja: ¿vas a indagar lo posible en busca de soluciones?
Hay quienes dirán que ya han puesto en práctica todo lo que se les ha ocurrido para enfrentar los problemas y no han conseguido nada. Pero os digo que hasta eso es un avance, porque ya sabes que cosas no funcionan y estarás cada vez un poquito más cerca de la solución óptima. Seguro que esta semana has oido alguna vez esta frase: No Tengas Miedo a Equivocarte. ¿Le das sentido ahora?
Piensa en positivo: ¿Qué reto toca superar hoy? ¿esta semana? ¿este mes? ¿qué soluciones se te ocurren?
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