Estoy irritable

¿Cuantas veces te habrás sentido especialmente irritable?

La irritabilidad es una emoción que puede tener distintas causas, pero que a menudo surge como respuesta a periodos de ansiedad sostenida.

En los casos más habituales de consulta, es un mecanismo adaptativo a través del cual, nuestro cuerpo únicamente quiere informarnos de que hay una situación de malestar que se está alargando demasiado y que ya no podemos tolerar.

Pensemos en cualquier ejemplo cotidiano que pueda ilustrar esta situación en su manifestación más habitual. Pongamos el caso de una persona que está desbordada por problemas en el trabajo – estos problemas no tienen porqué ser extraordinarios, podría tratarse de un pico de actividad temporal – que llega a casa y tiene que atender a sus hijos en edad especialmente activa y demandante, y que además hace varios meses que no encuentra un momento para dedicar a una actividad que realmente le motive. ¿Podría ser cualquiera verdad?

En este contexto es muy probable que aparezca irritabilidad, y que pasado un tiempo, incluso la persona tenga dudas de si es su estado de ánimo el causante de los problemas laborales y familiares. Se preguntarán, en algunos casos, si dichos problemas los han originado ellos con su carácter.

Como podrás suponer, es un círculo vicioso que se retroalimenta: a mayor estrés mayor irritabilidad, y cuanto más aumenta ésta, menos efectivos somos para resolver ese estrés, por lo cual se mantiene y sigue creciendo.

El problema que encontramos en consulta, es que la mayor parte de personas que acude por cambios en el estado de ánimo se empeña en controlar o erradicar esas emociones; en hacer que desaparezcan sin que ello implique cambios en su dinámica. Entonces, ¿queremos vivir bajo el estrés pero sin irritarnos? Esto es un error. Lo que debemos eliminar, o paliar, son las causas que originaron esas emociones, el estrés que nos ha agotado hasta sensibilizarnos de esa manera.

Es por este motivo que al hablar, entre otras cosas, de gestión emocional, debemos hablar también de gestión de tiempo, de elección de prioridades y de aprender a delegar  en lo posible. En cuanto a esto, ¿te consideras buen gestor de tu tiempo?

ROCIO JOVER MARTINEZ
PSICÓLOGA CV 11179
669 516 962 · psicologa@rociojover.com

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